Jaume Metepatas es un interno que a las 20 horas del día 15 de marzo de 2018 ingresa voluntariamente en el Centro Penitenciario de Daroca (Zaragoza) para cumplir una condena de seis años de prisión por un delito de estafa. A su ingreso, portaba una copia del testimonio de sentencia correspondiente a la causa por la que figura condenado así como la documentación personal acreditativa de su identidad, de tal forma que no se planteó ningún problema para su admisión conforme a lo establecido en el artículo 19.1 del Reglamento Penitenciario. Dentro de las 72 horas siguientes a su ingreso, el Director del Centro solicitó al Tribunal Sentenciador el testimonio de sentencia y la liquidación de condena, recibiéndose, vía fax, a las 13,30 horas del día 18 de marzo del 2018. (Por parte de la Oficina de Gestión del Centro se hicieron las comprobaciones necesarias para verificar la autenticidad de la documentación). Transcurrido mes y medio desde su ingreso, concretamente el 30 de abril de 2018, la Junta de Tratamiento, previo estudio del interno, formula propuesta de clasificación inicial en 2° grado de tratamiento, en acuerdo adoptado por mayoría de sus miembros, con el único voto discrepante del Educador quién considera que, en atención al tipo de delito no violento, a la primariedad delictiva y a la presentación voluntaria del condenado, lo procedente hubiera sido la clasificación inicial en tercer grado. El protocolo de clasificación penitenciaria contiene la propuesta razonada de grado y de destino al mismo Centro de Daroca y se remite al Centro Directivo el 16 de mayo de 2018. La propuesta tiene entrada en el registro de la Secretaría General de Instituciones Penitenciaria el 20 de mayo de 2018, dictándose resolución, de forma escrita y motivada, con fecha 18 de julio de 2018, clasificando al interno en 2° grado de tratamiento y manteniendo su destino en el Centro Penitenciario de Da roca. Transcurrido el plazo máximo establecido reglamentariamente, el interno vuelve a ser estudiado por la Junta de Tratamiento que, al revisar su clasificación, decide mantenerle en segundo grado. Esta decisión no satisface a Jaume que, asesorado por su abogado, decide recurrir el acuerdo de la Junta al Juez de Vigilancia Penitenciaria y, por si acaso, solicita también que la próxima revisión de clasificación la efectúe la Central Penitenciaria de Observación.

D. Fulgencio García es, lo que puede decirse, un político de raza. Ha ocupado diversos puestos en la Administración General del Estado, a saber, fue Subsecretario del Ministerio de la Presidencia; posteriormente, Secretario General Técnico del Ministerio de Cultura; más tarde Secretario General de Relaciones Institucionales y Coordinación del Ministerio de Fomento y, por último, Secretario de Estado de Educación y Profesional del Ministerio de Educación.
Sin embargo, su «currículum» no termina ahí, ya que también ocupó el cargo de Delegado del Gobierno en la Comunidad Autónoma de Murcia y, actualmente, es Director Insular en Menorca, en lo que considera un «apetecible» retiro.

D. Mariano Rodríguez Carpintero, es el candidato propuesto por el Rey, previa consulta con los representantes designados por los grupos políticos con representación parlamentaria, para ser investido Presidente del Gobierno.
D. Mariano expone su programa político y solicita la confianza del Congreso de los Diputados, pero como su victoria electoral ha sido muy «pírrica», en la votación de investidura no consigue la mayoría necesaria, por lo que a las 48 horas se celebra una nueva votación en la que resulta investido Presidente tras obtener la mayoría exigida de los votos de los Diputados.
La primera empresa que D. Mariano acomete tras su nombramiento es la de reestructurar los Departamentos Ministeriales y las distintas Secretarías de Estado, paso previo para efectuar el nombramiento de quienes van a ser sus titulares.
Una vez conformado el Gobierno, D. Mariano decide también crear nuevos órganos directivos en algunos Departamentos Ministeriales y suprimir otros.
Se celebra la primera reunión del Consejo de Ministros, a la que asiste el Gobierno en pleno, formado por el Presidente, dos Vicepresidentes y diecisiete Ministros. Quedan también conformados los distintos órganos de colaboración y apoyo del Gobierno.

Juan José Ojeda es un interno de 20 años de edad que se encuentra en el Módulo 10 del Centro Penitenciario de Zuera (Zaragoza) destinado a albergar a internos penados en régimen cerrado bajo la modalidad prevista en el artículo 91.2 del Reglamento Penitenciario. Concurre además la circunstancia de que Juan José está incluido en el Fichero de Internos de Especial Seguimiento, colectivo FIES-2, por su pertenencia a un grupo de delincuencia organizada. La primera revisión de su clasificación en primer grado, asi como de la modalidad de vida que tiene aplicada, se efectuó el 6 de junio de 2018, siendo el acuerdo de la Junta de Tratamiento el de mantenimiento tanto del grado como de la modalidad, con el único voto en contra del Subdirector Jefe del Equipo de Tratamiento del Centro de Inserción Social «Las Trece Rosas», dependiente del Centro. Penitenciario de Zuera. Efectuada la segunda revision trimestral, el acuerdo adoptado es idéntico en cuanto al mantenimiento de grado y modalidad, si bien, en esta ocasión, por unanimidad de los miembros de la Junta de Tratamiento. Notificada la revisión al interno, éste decide hacer uso expreso del derecho previsto en el articulo 105.2 del Reglamento Penitenciario.

VIctor Malamadre es finalmente progresado a segundo grado de tratamiento permaneciendo varios años con aplicación del régimen ordinario, siendo destinado al Centro Penitenciario de Daroca (Zaragoza), trabajando en talleres productivos y participando activamente en su programa de tratamiento. Como se aprecia en el interno una modíficación positiva de los factores directamente relacionados con la actividad delictiva, que se manifiesta en su conducta global, la Junta de Tratamiento acuerda formular propuesta de progresión a tercer grado en la modalidad prevista en el artículo 82.1 R.P., dada la peculiar trayectoria delictiva del interno y de que no dispone de trabajo en el exterior. La propuesta es confirmada por el Centro Directivo, que resuelve su progresión con destino a la Sección Abierta del Centro Penitenciario de Zuera (Zaragoza). En la citada resolución, escrita y motivada, que se notifica al interno, se hace constar que disfrutará de salidas en fines de semana alternos dada su modalidad. Por parte de los servicios sociales penitenciarios se ayuda al interno a que inicie la búsqueda de un medio de subsistencia para el futuro pero, por el momento, solamente se consigue su admisión para realizar un Curso de Inserción Profesional financiado por la Fundación «La Caixa», que requiere la salida diaria del interno durante tres horas a la sede del Curso.

La positiva evolución conductual de Víctor Malamadre le lleva a una reasignación en la modalidad de vida, pasando del art 91.3, a un Módulo de régimen cerrado, conforme a lo prevísto en el art. 91.2 del Reglamento Penitenciario. Malamadre, que ya ha cancelado también sus sanciones, participa destacadamente en actividades culturales y deportivas que se han programado en el Centro para grupos limitados de internos y que figuraban incluidas en su Programa Individualizado de Tratamiento (PIT) aprobado por la Junta de Tratamiento. No obstante, para evitar una prematura progresión al régimen ordinario y como una estrategia tendente a consolidar la conducta, se acuerda aplicar al penado el principio de flexibilidad previsto en el artículo 100.2 del Reglamento Penitenciario, con pase a otros Módulos y participación en actividades comunes, durante un periodo de tres meses.

Víctor Malamadre se encuentra destinado en un Departamento Especial del Centro Penitenciario de Topas (Salamanca), como consecuencia de una regresión de modalidad de vida dentro del régimen cerrado al ser protagonista de una alteración regimental muy grave en el Centro Penitenciario de Dueñas (Palencia) – apuñalamiento de un compañero – y reunir las características de peligrosidad extrema. Se trata de un interno penado que lleva más de un año clasificado en primer grado, con múltiples sanciones pendientes de cancelar. El Equipo Técnico de Régimen Cerrado del Centro Penitenciario de Topas se ha planteado como objetivo reconducir su conducta y actitud hacia el régimen ordinario, pero no va a ser tarea fácil por la escasa colaboración de Malamadre. Como primera medida, el Equipo Técnico se ha planteado proponerle como interno auxiliar para la distribución de las comidas en el Departamento o, en su defecto, para la limpieza de la zona de duchas. Ambas propuestas son rechazadas por Malamadre que prefiere permanecer en la celda viendo la televisión y leyendo los libros que, casi todas las semanas, recibe en los paquetes que deposita su familia cuando van a comunicar. Cuando lleva varios meses con la modalidad de vida del art. 91.3 del Reglamento Penitenciario, se da cuenta de lo duro que puede resultarle lo que resta de condena (más de ocho años de prisión) y decide interesarse por la participación en actividades programadas. De igual forma, quiere cancelar cuanto antes sus sanciones y mejorar globalmente su conducta.

En el Establecimiento Penitenciario Polivalente Madrid X que alberga unidades de régimen ordinario y de régimen cerrado, que incluye un departamento especial, se ha reunido el Consejo de Dirección el 16 de enero de 2018 para aprobar el siguiente horario para las unidades de régimen ordinario del establecimiento: 08:00 Recuento ordinario e higiene personal 08:30 Limpieza y orden de celda 09:00 Bajada a zonas comunes y desayuno 09:30 Apertura economato, cafetería e inicio de actividades. 13:30 Comida 14:30 Subida a celdas. Inicio de dos horas de descanso en celda. 14:45 Recuento ordinario 16:30 Bajada a zonas comunes e inicio de actividades 19:30 Cena 21:00 Subida a celdas 21:30 Recuento ordinario En este mismo Consejo de Dirección se han tomado en relación con la unidad del régimen cerrado, que incluye un departamento especial, una serie de decisiones: – Limitar a 7 el número de internos que podrán, de forma conjunta, efectuar actividades en grupo. – Establecer en 4 horas el tiempo de salida a patio de los interno. – Cacheo diario a los internos.

Por primera vez, el Reglamento Penitenciario , en su artículo 10.1, proporciona una definición de Establecimiento Penitenciario como «una entidad arquitectónica, administrativa y funcional propia». De los distintos tipos de Establecimientos Penitenciarios trata la Ley Orgánica General Penitenciaria, en los artículos 7 a 11, diferenciando entre Establecimientos de Preventivos, Establecimientos de Cumplimiento de Penas y Establecimientos Especiales, con las precisiones que, al respecto, se realizan también en el vigente Reglamento Penitenciario al clasificar los establecimientos de régimen abierto e introducir el concepto de Establecimiento Penitenciario Polivalente. Las distintas clases de Establecimientos Penitenciarios observan unas características de ámbito general comunes a todos ellos y otras de carácter particular en base al tipo de régimen de que se trate y de la personalidad de los internos que albergan.

La funcionaria Ataulfa se dispone a realizar un control y cacheo sobre las internas del módulo 11 previo a su salida al Polideportivo para verificar que salen las internas autorizadas y que no portan objetos prohibidos. Ataulfa, como al resto de internas, cachea por palpación a la interna JM y, tras no encontrar nada extraño, le ordena que pase por el arco detector. El arco emite un sonido grave a su paso y Ataulfa, ante la sospecha que pueda tener algún objeto metálico oculto le efectúa rápidamente un cacheo con desnudo integral en el cuarto de cacheo del módulo para evitar retrasar la actividad. Cuando se está desnudando JM extrae un teléfono móvil de su ropa interior y se dirige a Ataulfa de forma pausada “Aquí tienes lo que buscabas zorra”. Ante dichas palabras la funcionaria, sin dejar que se desnude completamente, agarra violentamente a JM y sujetándole dice: “Ahora te vas a ir a aislamiento” La interna se vuelve a poner la ropa que se había quitado tranquilamente y Ataulfa traslada, junto a dos compañeras, a JM hasta el departamento de aislamiento tras informar, durante el trayecto, al Jefe de Servicios que se persona inmediatamente e informa a la Directora de lo sucedido tras dejar a la interna aislada provisionalmente.